Fotografía

La cámara al paraíso (V): La postproducción


Si hemos seguido todos los pasos para conseguir una «foto perfecta» seguramente tendremos una buena fotografía, pero a veces no es suficiente. Cuando hablamos de edición o postproducción no tenemos por qué referirnos a la manipulación y falseamiento de nuestras imágenes; la mayoría de las veces nos sirve para simular lo que vieron nuestros ojos y la cámara no pudo captar, o para darle un toque personal que defina nuestro gusto visual.


Os voy a contar, de una forma sencilla, el proceso que sigo yo para perfeccionar mis fotografías.

Las herramientas

Mis fotos suelen pasar por dos filtros. El primero es el programa Adobe Lightroom, enfocado a la edición de archivos fotográficos originales. Podrás importar casi cualquier formato, pero serán los archivos sin compactar (llamados RAW) de los que Lightroom podrá sacar más jugo. Ya hablamos en el anterior capítulo que lo primero que debes decidir es en qué formato se guardarán tus fotos.


La segunda herramienta es Adobe Photoshop, y aunque no es indispensable para este trabajo, siempre me gusta pasar las fotos por él para realizar un par de posibles cambios finales.

El proceso de edición

Vamos a detallar cada paso importante que sigo cuando edito una foto mientras explicamos levemente el propósito de cada uno.

Añadir a la Biblioteca

Lo primero que deberemos hacer es importar a Lightroom las fotos que queramos editar. Posicionados en «Biblioteca» clickamos en «Importar…». Se nos abrirá una ventana donde podremos localizar nuestras fotos y seleccionarlas.



Revelar

Una vez importada la foto en la Biblioteca, la seleccionamos y vamos a «Revelar». Aquí es donde editaremos nuestra imagen.



Es el panel de la derecha con el que trabajaremos para hacer los cambios. No vamos a comentar todos los parámetros, sólo los más relevantes.


1. Recorte.

Con la herramienta «Recortar y Enderezar» definiremos el encuadre final de nuestra foto. Podremos cambiar la inclinación o recortar aquellas partes que no nos interesen. Las líneas de guía te ayudarán a alinear la foto con el horizonte.


2. Balance de blancos.

Si nuestro balance de blancos en cámara no ha resultado como debería, tenemos una última oportunidad para corregirlo. Con «Temperatura» y «Matiz» puedes modificar el tono general de tu foto y ajustarlo a lo que crees conveniente.


3. Modificar las luces y sombras.

Una de las partes más críticas de nuestra edición será encontrar el equilibrio correcto entre luces y sombras. Normalmente paliamos las consecuencias de un excaso rango dinámico por parte de nuestra cámara, y lo que hacemos es disminuir la luminosidad de las altas luces, y aumentar la de las sombras. De esta forma se apreciará mejor todo el espectro luminoso de la imagen.


El elemento «Exposición» no se suele tocar en exceso, solamente si la foto fue tomada muy subexpuesta o sobreexpuesta. Los parámetros que nos serán realmente útiles serán «Altas luces» y «Sombras». Bajando el primero y subiendo el segundo lograremos simular un gran rango dinámico: apreciaremos los detalles en las zonas más claras y también aquellos en las sombras.


El parámetro «Claridad» es muy útil. Lo que hace es ajustar el contraste de los medios tonos, es decir, logrará que la imagen sea «menos plana». Probadlo y considerad si os gusta o no.


Aplicadas estas herramientas, la diferencia entre el archivo original y el modificado ya es considerable:



4. Los colores.
A veces una foto no representa de forma fidedigna los colores que nos maravillaron en la vida real. Para solventar eso, podemos acudir a las siguientes herramientas.


La «Intensidad» potenciará la viveza de los colores, pero no acabará por desbordarlos como sí puede llegar a hacer la «Saturación». Personalmente, no suelo tocar la «Saturación», y si lo hago es mínimamente.


Otra opción será ir a «HSL / Color» y modificar el tono, la saturación o la luminancia por colores independientes.
Si por ejemplo, sólo quieres resaltar el azul del cielo, o quieres cambiar el tono del azul para que sea un poco más verdoso, esto te servirá.


5. Viñetas o degradados.

Un toque bastante agradable suelen ser las viñetas circulares o los degradados lineales. Yo suelo utilizar ambos de manera sutil, sin que se note demasiado, y siempre es para oscurecer y no para aclarar.


Dependiendo de la foto, sobre todo si es un paisaje, el degradado superior añade un toque bastante artístico, al cual se le puede agregar un cambio de Temperatura o Matiz además de la luminosidad. Aunque en la foto que he elegido no encajan demasiado bien, ahí van un par de ejemplos del efecto que tienen.



6. Otros detalles importantes.

– En «Correcciones de lente» asegúrate de clickar en «Quitar aberración cromática». Esto eliminará automáticamente algunos bordes violetas o azules causados por la lente de la cámara al tomar la fotografía.


– Lightroom también tiene una herramienta automática para eliminar ruido a la vez que enfoca (si se quiere) la imagen. En «Detalle» encontrarás dos parámetros: «Enfoque» y «Reducción de ruido». Juega con estas características hasta que el resultado te convenza.

Exportar

Cuando tengamos la foto que queremos, pinchando Botón derecho sobre ella -> Exportar -> y seguimos los pasos para guardarla donde deseemos.

Paso a Photoshop

Como sabéis Photoshop ofrece una infinidad de posibilidades y podríamos hacer magia con nuestra fotografía. Pero a mí, particularmente, no me gusta trastocar demasiado lo que he conseguido en Lightroom porque considero que ésa es la representación más fiel de lo que vi en el momento.


Lo que sí suelo usar son las opciones «Auto Tone», «Auto Contrast» y «Auto Color» que se encuentran dentro de la pestaña «Imagen». La mayoría de las veces estas opciones mandan al traste nuestra foto, pero otras corrigen un equilibrio de colores o un contraste de una forma que no habíamos podido preveer en la edición manual. Una imagen muy verde o muy apagada, que nuestros ojos no apreciaban, puede ser corregida gracias a esto.


Además, suelo recurrir a la herramienta «Levels» (Niveles) para darle los últimos toques de luz y sombras. Al margen de lo correcto, aquí entra mi vena artística y cómo quiero que la foto acabe resultando. Por ejemplo, muchas veces no me gusta que los negros sean totalmente negros; o quiero que las luces tengan un toque amarillento. Cambiando el «Channel» (Canal) entre RGB, Rojo, Verde o Azul y modificando los parámetros se consiguen estos efectos.


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David

2 Comentarios

  1. Pues sí que es la hostia esto de la postproducción… no hay como ver un ejemplo para darte cuenta de las posibilidades que ofrece. A partir de ahora a sacar las fotos en RAW. Muy bueno.

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